Las actividades de conversación con nuestros auxiliares están resultando un éxito y cada vez más familias se acercan a conversar con ellos. Muchos padres han aprovechado la oportunidad para sentarse con sus hijos y nuestros asistentes de conversación nativos para comprobar como se desenvuelven con naturalidad en esta segunda lengua.

Pudimos disfrutar de su presencia durante la jornada de puertas abiertas y fue tanta la diversión y aprovechamiento de la actividad que esta última semana antes de las vacaciones de pascua repetimos de nuevo. Aunque esta vez fue algo muy especial, pues a nuestros tres compañeros, James, Angelina y Willow, se sumaron Nancy y Robert, los padres de esta última, que se encontraban de visita en nuestra ciudad.
Así pues y aprovechando una tarde algo más primaveral, hicimos un cambo de escenario y sacamos la propuesta al patio del colegio cuando las clases ya habían terminado por la tarde.
Pequeños y mayores se sentaban junto a ellos para elegir temas de conversación de diferentes dificultades y niveles que se mostraban en tarjetas de colores y que a su vez derivaban en otros temas de diálogo.

Las conversaciones se sucedieron una tras otras durante buena parte de la tarde, Aitor y su papá hablaron largo rato con Robert sobre dinosaurios y las similitudes que el americano encontraba entre Teruel y su ciudad Boulder en el estado de Colorado. Elsa, Rosa y Susana , tres de nuestras familias de acogida que han convivido con ellos se acercaron hasta donde se encontraba James Davis de Reino Unido con quien rieron con las ocurrencias que a veces surgen cuando te comunicas en inglés. Willow hablaba de mascotas con los más pequeños y también de frutas, de fiestas tradicionales y hasta le explicaron cómo son las vaquillas de julio. Angelina escuchaba los relatos de algunas alumnas de sexto sobre tradiciones y costumbres y ella que estudió Agrícolas en la universidad de Londres, también les contaba curiosidades sobre la primavera que es buena época para plantar.Con Nancy hablaron niños y también alguna abuelita que supieron que ella trabaja en un colegio como maestra de educación especial.

La experiencia una vez más nos demuestra que no sólo se trata del idioma sino de compartirlo en un contexto real donde se encuentre una utilidad y una motivación, al mismo tiempo que existe un intercambio cultural que es de suma necesidad para mantener el interés en el aprendizaje de lenguas extranjeras.