En infantil hemos trabajado el proyecto de la alimentación saludable y decidimos que una buena forma de concluirlo podía ser que los niños con un trozo de masa se fabricaran su propio panecillo.

Para llegar hasta este momento indagaron e investigaron a diario hasta conocer el ciclo del pan, para ello se informaron a través de vídeos, escucharon cuentos e historias relacionadas con la panadería, observaron láminas, cantaron canciones y realizaron un cuaderno de actividades con los ingredientes y el proceso de elaboración del pan.

El día que hicieron su panecillo, estaban invitadas a venir a clase sus familias para colaborar en esta actividad tan motivadora. Los niños y sus papás pasaron un rato agradable compartiendo conocimientos y ayudando a dar forma a la masa para conseguir un buen pan. Una vez terminado lo pusieron en unas bandejas muy grandes y la cocinera del colegio muy amablemente se encargó de hornearlo.

Los pequeños pudieron llevarlos a casa a la salida del colegio, para degustarlos en la merienda con un trozo de chocolate y, la verdad, es que les salió riquísimo.

De esta forma conseguimos que los aprendizajes fueran mayores, más significativos y sobre todo se divirtieron mucho.