Nuestra querida Lola se ha jubilado.

Después de 23 años ejerciendo de cocinera de la Comunidad del Hermanos y del servicio de comedor colegial, el pasado mes de julio se jubilaba nuestra querida Lola, un ejemplo de profesionalidad, arte en la cocina, disponibilidad y cercanía. 

Quedarnos a comer en el colegio siempre ha sido motivo de satisfacción porque nos permitía probar sus deliciosas comidas caseras, que tanto gustan a grandes y pequeños, y disfrutar de sus “detalles culinarios” que enriquecían sus menús.

Cuidadosa al máximo con intolerancias, alergias… nuestro alumnado siempre ha estado en las mejores manos.

Dispuesta a colaborar en cualquier actividad que requiriera utilizar el servicio de comedor, teníamos la certeza de que estando Lola al frente, el éxito estaba garantizado. Daba igual el número de comensales, con exquisita organización nos daba de comer a todos con sus deliciosos platos.

Servicio de desayuno, almuerzo, comida… a todo llegaba teniendo puntualmente todo preparado. Incluso en tu despedida te has preocupado de dejarnos en buenas manos, recomendándonos a la mejor sustituta, Maribel, que sigue con gran acierto tus pasos.

Por todo esto y mucho más… Gracias Lola. Te deseamos que disfrutes de tu merecida jubilación y de tus dos hijas que serán las que ahora se deleitarán con tus menús. Esperamos seguir viéndote por tu colegio, en el que siempre contarás con un montón de amigos.

¡Hasta siempre Lola!